Con el AI Act, el reglamento de la UE de inteligencia artificial, la Unión Europea pretende establecer un marco normativo común que tendrá repercusiones en el metaverso para los países miembros de la UE. El marco normativo de la UE es necesario para garantizar la protección y el respeto de los derechos fundamentales, la transparencia y la rendición de cuentas en el uso de entornos digitales como el del metaverso y los productos resultantes de la IA. El reglamento establece las pautas para el uso de la IA en sectores específicos, como la salud, la justicia y las fuerzas armadas, y define las sanciones por violaciones a las disposiciones del reglamento.
Marco normativo europeo para la IA
El reglamento europeo proporciona un marco normativo y jurídico para el uso de la IA que garantiza la protección de los derechos fundamentales y la transparencia en el uso de la IA.
Las normas para la vigilancia del mercado de la IA se han simplificado y aclarado para que sean más eficaces y aplicables. El texto modifica significativamente las disposiciones sobre el Comité de IA, con el objetivo de fortalecer su poder de decisión y aumentar su autonomía en la legislación sobre IA.
Para comprometer los diversos intereses relacionados con la implementación de la legislación de IA, incluida la creación de actos ejecutivos y delegados, se requiere que el Comité establezca un subgrupo permanente que sirva como plataforma para una amplia gama de partes interesadas. En caso de vulneración de las disposiciones sobre IA, las multas administrativas se han ajustado a los techos más proporcionados para pequeñas y medianas empresas y start-ups.
El Consejo de la UE quiere promover el desarrollo y la adopción en todo el mercado único de una IA segura que respete los derechos fundamentales, a fin de acelerar las inversiones en Europa.
Protección de los derechos fundamentales y Transparencia y responsabilidad en el uso de la IA
Uno de los principales objetivos del IA Act es garantizar la protección de los derechos fundamentales en el uso de la IA. El reglamento establece disposiciones para permitir el uso de la IA, sin que ello comprometa derechos fundamentales, como la libertad de expresión, la privacidad y la dignidad humana.
El reglamento también exige transparencia y responsabilidad en el uso de la IA. Por ejemplo, los desarrolladores deben garantizar que sus sistemas sean transparentes y que puedan informar sobre sus decisiones y cómo operan. Además, se espera que sean responsables de las consecuencias del uso de sus sistemas de IA.
Directrices para el uso de la IA y la realidad inmersiva
Las directrices de la Ley de IA tienen por objeto garantizar que esta se utilice de manera responsable y segura, preservando al mismo tiempo los derechos fundamentales y la transparencia, y prevén:
- Solicitud de transparencia: los desarrolladores de IA deben garantizar que sus sistemas sean transparentes y que puedan informar sobre sus decisiones y cómo operan.
- Responsabilidad del desarrollador: se espera que los desarrolladores de IA sean responsables de las consecuencias del uso de sus sistemas de IA.
- Informes de decisiones: se espera que los desarrolladores de IA informen sobre las decisiones que tomaron sus sistemas y cómo se tomaron esas decisiones.
- Divulgación de información: se espera que los desarrolladores de IA divulguen información sobre cómo operan y sus decisiones.
- Protección de datos personales: el reglamento establece disposiciones para garantizar que los datos personales sean tratados de forma responsable y que estén protegidos de posibles violaciones de la privacidad.
- Sanciones por infracciones: el reglamento establece sanciones por infracciones a lo dispuesto, con el fin de garantizar que los desarrolladores de IA cumplan con las normas y directrices establecidas.
La opinión de la autoridad garante de Protección de Datos sobre los métodos de desarrollo del Metaverso
Incluso la autoridad italiana de protección de datos cuestiona los métodos de garantía de derechos en el espacio virtual, lo que hace que los derechos reales estén más expuestos.
Se hace imprescindible identificar y adoptar algunas garantías esenciales para evitar que el espacio del metaverso sea utópico de lo posible y se vuelva anómico. Un lugar en el que vulnerar el espacio de los derechos sin límite ni sanción alguna. Una empresa fuera de control. “La personalización de los contenidos del Metaverso – dice la autoridad garante – permitirá que surjan nuevas instancias de protección frente a nuevas vulnerabilidades e incluso nuevas subjetividades, como la del gemelo digital en el que se proyectará nuestro ego”
Ya hoy el metaverso se prefigura como un espacio articulado persistente y tridimensional en el que es posible actuar en una realidad paralela, donde la protección de los derechos no está configurada por ninguna ley.
“En la medida en que esta nueva dimensión aparecerá como cada vez más probable, capaz de simular la realidad casi sustituyéndola – continúa el garante Stanzione – podría terminar representando el lugar de infinitas posibilidades en el que liberarse de la inmensa concreción de la realidad. La transversalidad y multiplicidad de experiencias susceptibles de ser implementadas y el volumen de información que se podría generar en el metaverso determinará una recolección de datos personales no comparable con la de la web en cantidad y calidad. Los datos serán biométricos, transmitidos por dispositivos portátiles de los que se deberá prevenir cualquier uso abusivo, y será necesario replantear el sistema de recogida de consentimiento y las garantías de transparencia en las obligaciones de información”.
Además, en opinión del Garante, debido al elevado índice de interacción entre los usuarios y la consiguiente necesidad de proteger a los menores de experiencias perjudiciales, la garantía de la verificación de la edad será decisiva, supuestamente con sistemas que no supongan un seguimiento excesivamente invasivo de la actividad del usuario.
El metaverso como un ‘no-lugar’ en el que vuelven a surgir los mismos problemas de la sociedad real.
La necesidad de pensar un marco normativo capaz de establecer los límites de la libertad, los principios, los derechos, los deberes en el metaverso, tal como ya se ha pensado y ha ocurrido en las sociedades reales, está determinada por el hecho de que la evolución de las las sociedades virtuales implican al ser humano en su verdadera dimensión pública y privada.
Asistencia jurídica en el metaverso
La asistencia jurídica del metaverso para los derechos derivados de los mundos virtuales y la realidad aumentada será cada vez más demandada. Las cuestiones relativas a la propiedad intelectual, las transacciones comerciales, la privacidad, la protección de datos y el uso de los contenidos serán los bienes jurídicos hacia los que se dirijan las solicitudes. En este nuevo espacio digital en rápida evolución, las leyes y reglamentos aún se están desarrollando y la jurisprudencia es limitada para cuestiones legales relacionadas con la propiedad virtual y la responsabilidad por el comportamiento del usuario dentro de la realidad virtual.
La asistencia legal en el metaverso representa una nueva frontera para los abogados y una oportunidad para brindar servicios innovadores a los clientes. Con la creciente importancia del mundo virtual y la realidad aumentada en la vida diaria de las personas, surgen cada vez más problemas legales que requieren soluciones adecuadas. Por tanto, los abogados estarán llamados a prestar asesoramiento y asistencia jurídica en este nuevo espacio digital, tanto a particulares como a empresas para la protección de los clientes en:
- Abuso comercial
- Abuso en la elaboración de perfiles
- Abuso del procesamiento de datos personales
- Abuso en la manipulación del consumidor a través de un proceso imitativo
La capacidad de comprender y navegar este nuevo territorio será un factor clave para los bufetes de abogados más calificados.