Una sentencia reciente de la Corte de Casación ha revolucionado la solicitud de reconocimiento de la ciudadanía italiana por sangre para muchos descendientes de italianos emigrados a países latinoamericanos como Argentina, Brasil, Uruguay, Venezuela a partir de 1861, año de nacimiento del Estado italiano. El reconocimiento del derecho iure sanguinis está vinculado a la demostración de la transmisión ininterrumpida de la pertenencia a Italia del ascendiente de los solicitantes de la ciudadanía. En resumen, para haber reconocida la ciudadanía italiana es suficiente probar la cadena de descendencia, es decir, que el abuelo, bisabuelo, tatarabuelo de ascendencia italiana sin límites generacionales, nunca ha perdido la ciudadanía y, por lo tanto, la transmite al descendiente que la solicite al Consulado italiano.
Listas de espera para la solicitud de concesión de Nacionalidad Italiana por Tatarabuelo
Aclarado esto y presentada la solicitud, esta termina en las listas de espera para el reconocimiento de ciudadanía. Sin embargo, el Ministerio del Interior en Italia se opone, e impide la concesión de la ciudadanía italiana a quienes la soliciten ya sea por vía administrativa ante el Consulado, en el caso en que el ascendiente sea un hombre, o por vía judicial en el caso de que el ascendente es una mujer. De hecho, en los casos en que la transmisión del derecho a la ciudadanía italiana iure sanguinis se produce a través de la madre, se debe solicitar el reconocimiento al juez.
La sentencia de la Corte de Casación revoluciona los principios por los que se reconoce la transmisión de la ciudadanía a los descendientes
Los hechos de los que surge la sentencia están relacionados con una solicitud de reconocimiento de ciudadanía italiana iure sanguinis, sin límites generacionales, después de muchos años por parte de un ciudadano de Brasil. El Ministerio objeta que en 1889 Brasil había naturalizado por ley a todos los ciudadanos extranjeros inmigrantes. En esa ocasión, los inmigrantes fueron invitados a formalizar su deseo de mantener su ciudadanía de origen, de lo contrario habrían sido considerados ciudadanos exclusivamente brasileños. Dado que no había sido posible probar que el ascendiente del demandante había presentado esa declaración, ya no podía ser reconocido como ciudadano italiano.
Invalidez del principio de efectividad y los casos de pérdida de la ciudadanía italiana
El Ministerio del Interior consideró que el ciudadano italiano, por el solo hecho de haberse mudado efectivamente a otro país por trabajo, había hecho una elección tácita a favor de la ciudadanía brasileña. Pero el trabajo de reconstrucción de las fuentes normativas realizado por la Corte de Casación prueba que:
- la elección de evaluar un comportamiento específico con el fin de adquirir o perder la ciudadanía italiana recae únicamente en el legislador nacional o italiano;
- la ley italiana siempre ha dispuesto que la pérdida de la ciudadanía depende del comportamiento “activo” y “voluntario” y ninguno de estos comportamientos había sido probado por el Ministerio contra el ascendiente del solicitante;
- el Tribunal de Casación de Nápoles, ya en 1907, discutió la relevancia de la “gran naturalización brasileña” en el ordenamiento jurídico italiano, llegando a las mismas conclusiones, osea que por el mero hecho de haberse naturalizado, los italianos presentes en Brasil en 1889 no perdieron la ciudadanía;
- en relación con un estatus importante como el de ciudadano, debe aplicarse el principio de compartir la carga de la prueba. Corresponde al descendiente probar la atribución original de la ciudadanía italiana y la transmisión ininterrumpida y sin límites generacionales a la persona que la solicita. Pero al mismo tiempo corresponde a quien quiera alegar una circunstancia que impide o extingue el derecho a la ciudadanía italiana producir la carga de la prueba, en este caso al Ministerio del Interior.
Cómo solicitar la ciudadanía po sangre y obtenerla. Ciudadanìa italiana requisitos
La concesión de la ciudadanía está vinculada a la solicitud acompañada de documentos que sirvan para acreditar la transmisión ininterrumpida de la ciudadanía iure sanguinis. En el caso que la transmisión del derecho iure sanguinis se produzca a través de la madre, sigue siendo necesario solicitar el reconocimiento al juez.
El bufete internacional de abogados Damiani & Damiani trabaja desde hace años en el estudio del derecho a la inmigración en relación con la concesión y el reconocimiento del permiso de residencia y la ciudadanía, y ofrece consultoría en línea para ayudar en la solicitud de la ciudadanía italiana tanto por vía administrativa como judicial.
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